REFLEXIONES EN LA CUARENTENA
Por
Coronel Héctor José Corredor Cuervo
La
cuarentena es sagrada
para
los seres pensantes
que
no miramos como antes
la
lumbre de la alborada
que nos traía afanada
la ansiedad por el dinero
para
lucir de primero
sin
ver que nada llevamos
cuando
al final nos marchamos
como
lo hace un pordiosero.
La
vida que nos dio Dios
no
es muy dulce ni es amarga
si
a nuestra mente la embarga
seguir
sus huellas en pos
y
al mundo llevar su voz
con
la luz de la hermandad
para
ver la humanidad
disfrutando
el paraíso
que
nos dio con compromiso
de
servir con humildad.
En
medio del aislamiento
de
pandemia universal
por
virus de un animal,
que
ha causado descontento
por social alejamiento,
es
necesario entender
que
el dinero y el poder
no
están primero que vida
y
que unión es la salida
para
los males vencer.
La
pandemia es general
la
que violenta la tierra
como
despiadada guerra
que
ataca a todo mortal
con
sevicia en forma igual
al
rico y al indigente
lo
cual requiere que urgente
se
logre la integración
del
total de población
con
mucha fuerza en la mente.
Quienes estamos aislados
en
la casa y sin afanes
debemos
ser los guardianes
de
médicos y soldados
que
luchan muy afanados
sacrificando
sus vidas
por
curarle las heridas
con
amor entre sus manos
a
muchos seres humanos
con
las almas afligidas
Al contemplar la
emergencia
y
acción de la humanidad
vemos la oportunidad
de cambiar nuestra conciencia
para actuar
con transparencia
y educar a mucha gente
que no cuida
el medio ambiente
la cual con
actos arruina
y con broza contamina
la patria y el continente.
El
rico y el poderoso
deben
tan solo entender
que
ayudar es gran placer,
al
que en camino escabroso
le
dio su brazo amoroso
con
rayos de mansedumbre
para
subirlo a la cumbre,
el
cual hoy requiere apoyo
para
huir del asfixiante hoyo
sin
aire y sin luz que alumbre.
El corrupto dirigente
y
ambiciosos de poder
deben
tan solo entender
que
ya hay cambios en la mente
y
que muy probablemente
espaldas
serán mostradas
por
sus amnesias marcadas
y
por su miedo al contagio
de
quien les vendió el sufragio
en
elecciones pasadas.
Y
ya para terminar
estas
cortas reflexiones
conservemos
ilusiones
de volver
a caminar
y
en libertad abrazar
la
familia y mucha gente
que
respeta el medio ambiente
y
sienta el gozo al soñar
viendo
a las aves volar
y
disfrutando el presente.
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